Costó construirlo más de lo que alguien se puede pensar, era vulnerable, pero al final con mucho esfuerzo, y muchos palos lo logré, me hice de hielo y me congelé. No había dolor, pero tampoco había nada más. Hoy note como se quebraba unas milésimas, y sentí algo, una sensación que me llegó directa al corazón. Unas gotas cayeron de esa capa, provocando una atisbo de felicidad, que me hizo sentirme plena, aunque fuera por unos minutos.

0 Opinions:

Publicar un comentario