Susúrrame al oído que soy tu pequeña, al compás de nuestra canción de Tiziano Ferro sonando lentamente en aquel CD de vinilo. Apaga la luz y muévete sensualmente hasta mi cama, deja que te arranque lentamente la ropa para sentir esa mágica reacción química de nuestros cuerpos. Nos atraemos, como dos protones, como dos leones cuando están en celo. Deseos de sentirte, de notar tu carne contra mi carne, ¡oh si pequeño! quiero que me gimas al oído y hagas que esta noche normal se convierta en una especial para los dos.

0 Opinions:

Publicar un comentario